Un contrato que obliga a comprar o vender un activo subyacente a un precio acordado en el futuro.
Contrato de futuros de tasa de interés a 10 años.
Son activos financieros que tienen un valor que depende del precio de otro activo.
Acciones de una empresa.
Se refiere a la posibilidad de operar con un capital propio inferior al total invertido, lo que puede ampliar las ganancias pero también las pérdidas.
Opciones financieras.
Los derivados financieros permiten a los inversores cubrirse ante posibles riesgos financieros.
El riesgo de liquidez, es decir, la posibilidad de no poder vender el derivado cuando se desee.
Futuros sobre índices bursátiles.
Contratos de permuta financiera (swaps) de divisas.